El gato con botas.
Erase una vez…
Así empiezan los cuentos…

Mis hijos cuando eran niños comían poca fruta, solo plátano y manzana.
A diferencia de mí, que desde niña me la he comido toda.

De mayores siguen sin ser muy apasionados de la fruta,bueno a mi hija le gusta toda,pero no necesita comerla como yo.
Mi hijo sigue sin gustarle,pero si que come cosas que de niño ni las probaba.
Un día me sorprendió comiendo sopa de langosta, no me lo podía creer.

Ninguno de ellos dos necesita comer postre después de una buena comida, a diferencia de mi que si  no como postres, me siento como que me falta algo.

Este sencillo postre esta ideado para los niños que no les gusta la fruta, o hay que distraerlos para comer.
Como veis, he ordenado la fruta como los colores del semáforo, rojo, verde y amarillo.
Si contarles como son los colores del semáforo no funciona,  siempre le podemos contar un cuento…
 en este caso…el gato con botas;)

El gato con botas.
Ingredientes:
mango
fresas.
kiwie.

Preparación y emplatado:
Ponemos en  un vaso divertido, las frutas cortadas a trocitos y por colores del semáforo, y si tenemos una cucharilla de moka le pinchamos en la punta una fresa, queda divertido.
Si nos gusta, le podemos poner, bolitas de chocolate con cereales.